En las ventanas de PVC no existe la sensación de pared fría con lo cual es más difícil que aparezca la condensación. En caso de que aparezca, aparecerá primero en el vidrio y no en el perfil. Las ventanas de PVC van reforzadas en su interior con refuerzos de acero con lo que se consigue una mayor rigidez de la carpintería y una menor deformación del perfil. En el caso de que las ventanas de PVC sufran algún arañazo, no se va a producir la oxidación o putrefacción. Las ventanas de PVC necesitan un escaso mantenimiento. Únicamente la limpieza con agua jabonosa es suficiente. |
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